martes, 11 de septiembre de 2007
Adentro, mi nido - Copyright © 2007
Luz vidal
El soporte retorcido de las noticias periodísticas, devenidas en enmarañadas enredaderas
víboras, que avanzan como desde la totalidad del espacio público hasta la intimidad de los ámbitos privados y la sacralidad de nuestros cuerpos, se conjuga con el deseo de protección de retorno al lugar inicial de la crisálida y al cobijo del nido.
Nada más contradictorio, pero nada mas parecido a las vigilias y los sueños urbanos o a esa transmutación que de lo inmediato realiza la práctica de los artistas.
Héctor Medici
El soporte retorcido de las noticias periodísticas, devenidas en enmarañadas enredaderas
víboras, que avanzan como desde la totalidad del espacio público hasta la intimidad de los ámbitos privados y la sacralidad de nuestros cuerpos, se conjuga con el deseo de protección de retorno al lugar inicial de la crisálida y al cobijo del nido.
Nada más contradictorio, pero nada mas parecido a las vigilias y los sueños urbanos o a esa transmutación que de lo inmediato realiza la práctica de los artistas.
Héctor Medici
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